Hopewell Rocks, las mareas más extremas del mundo. CANADÁ

Escrito por Inés
3 de diciembre de 2014 3 comentarios

La Bahía de Fundy en Canadá es conocida por sus mareas extremas que superan los veinte metros. Según algunos expertos, se trata de las más altas del mundo sobre todo en el lugar donde nos encontramos, en Hopewell Rocks, o al menos es el sitio donde es más fácil percatarse de este fenómeno. Una leyenda micmac dice que las mareas de la bahía de Fundy están causadas por una ballena gigante que agita el agua, tribu indígena que por otra parte, habla un pidgin del euskera por la influencia de los balleneros vascos pero no nos desviemos del tema. Los oceanógrafos tienen otra explicación más científica relacionada con la singularidad geográfica de la bahía que reúne todas las características para que se produzcan estas mareas extremas. Según explican, el período que toma el oleaje para ir de un extremo a otro de la bahía y el tiempo entre dos mareas altas es parecido (12,4 horas). Estos dos fenómenos entran en resonancia, lo que hace que la diferencia entre la marea alta y la marea baja sea mayor.

TIME LAPSE DE LA MAREA

Por otra parte, como la bahía se va estrechando poco a poco entre su entrada y las bahías del fondo de este brazo de mar, el volumen de agua se ve forzado a aumentar su altura para compensar la disminución de la anchura. Esto último cuesta un poco de imaginar, así que os invito a que lo veáis directamente con este time lapse que realizaron los empleados de Hoppewell Rocks, que se ha convertido en un lugar al que acuden curiosos de toda Canadá. Esta filmación se tomó en uno de los momentos de la temporada en el que las mareas son más extremas. Estos valientes canadienses se colocaron en un punto cerca de la orilla con el agua a los pies, pero en tan solo 27 minutos el mar les llegaría hasta la barbilla. Obviamente no iban a arriesgarse a permanecer más tiempo, ya que realmente la marea sube muchísimo más. Si os fijáis en las enormes rocas, las hendiduras que presentan son fruto de la erosión del agua: muestran hasta dónde llega el agua del mar.

CONSEJOS

La distancia desde el Centro de Interpretación hasta el acceso a la playa es de aproximadamente 750 metros, unos 10 a 15 minutos a pie por un sendero señalado. Mientras que el mejor momento para ver las rocas es durante la marea baja, para caminar por el suelo marino hay que esperar hasta tres horas antes y después del punto más bajo de la marea. Aunque hay empleados de Hoppewell Rocks velando por la seguridad de los turistas, al final cada visitante es responsable de sus actos. Y por supuesto, no escales las rocas. El precio de la entrada cuesta 5’75$ pero hay descuentos de grupo, para niños, etc. Ah, y si vas a caminar por el fondo, ¡lleva un buen calzado que no resbale!

LAS MARISMAS

Estos exuberantes humedales verdes juegan un papel importante en el frágil ecosistema de la Bahía de Fundy. Las Marismas proporcionan alimentos y nutrientes en forma de algas y plantas en descomposición que son arrastradaspor las mareas. Estos nutrientes son consumidos por animales marinos diminutos como las gambas del barro y otros animales marinos más grandes, como peces y plantas. Y es que la marisma es un refugio entre las mareas, es el núcleo de una compleja cadena alimentaria que afecta a los seres vivos en la tierra y en el mar. Aquí se dan áreas de anidación y alimentación para los animales terrestres, como los ciervos que vienen en busca de pasto o las garzas azules a las que les gusta chapotear en las piscinas poco profundas que deja la marea en busca depeces varados. Y cómo no, la Bahía de Fundy es una importante parada para repostar para miles de aves limícolas cada año desde finales de julio hasta mediados de agosto (las aves que viven en el lodo). En el camino de sus zonas de anidación árticas hasta que migran a Sudamérica para pasar el invierno, estas aves hacen una escala en Hopewell Rocks para descansar y engullir un montón de pequeñas gambas del barro que encuentran en la bahía. Con este atracón consiguen duplicar su peso: esta grasa extra les da la energía necesaria para completar su viaje.

SI TE HA INTERESADO…

No es la primera vez que hablo sobre mareas en este blog: –Dunbar: un pueblo escocés donde las mareas me jugaron una mala pasada –Frisia: en el norte de Holanda pude caminar por el fondo del mar, algo que puede realizarse durante algunas horas al día.   NOTA: Este viaje forma parte de la ruta por la costa Este de Canadá que realicé con la agencia de viajes para mochileros Moose Travel que encontré a través del buscador de viajes alternativos Tuanys.