Balneario de Alange: «ahora» Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO
¿Quién podría imaginar estar bañándose en un lugar donde hace siglos también se bañaban los romanos?
Yo desde luego no lo hubiese imaginado jamás, y he tenido el gran privilegio de poder disfrutar de las Termas de Alange y de su Balneario, reconocido y apreciado desde tiempos remotos por las propiedades curativas de las aguas del manantial que lo abastece.
El privilegio ha sido enorme y no solamente por la riqueza histórica y cultural que envuelve a Alange, sino también por varias razones:
Recientemente, el Balneario ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad, pero la realidad es que lleva siéndolo desde Diciembre de 1993. Es decir, las Termas de Alange son Patrimonio de la Humanidad desde hace unos veinte años y nadie en Alange había sido informado de ello.
La noticia estalló al aparecer el Balneario en un nuevo catálogo de monumentos Patrimonio de la Humanidad. Cuando Mérida presentó su dossier a la UNESCO para ser Patrimonio de la Humanidad, incluyó el Balneario dentro del conjunto arqueológico emeritense ya que era lugar de descanso de los romanos de Emérita Augusta. Como Alange era un municipio propio y las termas de una entidad privada, la alcaldesa de entonces “pasó la pelota” a los dueños del Balneario. Y a partir de ahí… “VACIO LEGAL”. El asunto quedó en un segundo plano y hasta hoy.
¿El motivo de este “pequeño” descuido? Algunos afirman que fue un olvido por parte del Consorcio de Mérida y otros que detrás existían algunos intereses políticos, con lo que se llegó al punto de que ninguno de los alcaldes ni gestores del Balneario ha tenido constancia de dicho reconocimiento. Ahora, el actual director del balneario, Fernando Fernández-Chiralt, al que tuve el placer de conocer, pretende aprovechar esta oportunidad que tan tarde se le ha otorgado para promocionar el balneario y sobre todo, para que las autoridades señalicen adecuadamente la Autovía, ya que aunque el Balneario esté muy próximo a Mérida, las indicaciones no ayudan mucho a encontrarlo.
Tuvimos una anfitriona excepcional, Ana López Ruíz, que además de enseñarnos todos los entresijos del lugar y de tratarnos cómo marqueses, me habló de su visión sobre el tema: “Creo que es una fantástica noticia, porque es uno de los pocos monumentos que aún está en uso y cumple las mismas funciones para las que fueron construidas, lo que lo hace más exclusivo. Va a ser una forma de que se publicite más y mejor, y que además sea conocido no sólo en España, sino fuera. Y supongo que también habrá alguna subvención para mejorar las instalaciones”.
Otro de los motivos por los que hay que visitar el Balneario de Alange es por sus aguas mineromedicinales. El agua del manantial de Alange es célebre por sus propiedades terapéuticas. Brota de un manantial a 28ºC y posee radón alfa, litio, carbonatos y bicarbonatos de sodio, magnesio y calcio. Miles de visitantes acuden al balneario a tratar diversas enfermedades ya que por sus características está indicada clínicamente para el tratamiento de la artritis, afecciones del sistema respiratorio, problemas circulatorios, varices… Pero lo más importante es que sus propiedades la convierten en la única nacional y de las pocas de Europa especialmente indicada para el sistema nervioso. Cómo le gusta apuntar al director, ésta es la principal diferencia entre “spa” y “balneario”, que la finalidad de un balneario es el tratamiento de la salud gracias a las propiedades medicinales de sus aguas.
¿Cómo llegar al balneario de Alange?
Pero situémonos… Para llegar a Alange hay que tocar el corazón de Extremadura, hay que llegar a Mérida. Una vez allí a tan solo 18 kilómetros tenemos siglos de historia para complacernos. El pueblo está rodeado por un gran embalse que además ofrece todo tipo de actividades náuticas (vela, piragüismo, windsurf…) vigilado desde las alturas por el Castillo de la Culebra, de vital importancia en la antigüedad, ya que por aquí pasaba la Ruta de la Plata y el castillo controlaba el paso.
¿Dónde alojarse en Alange?
Para alojarnos tenemos muchas alternativas, yo os presento los dos hoteles adscritos al Balneario, aunque en el pueblo tenéis una gran oferta de casas y hoteles rurales y alojamientos de gustos variopintos.
Gran Hotel Aqualange: Un hotel muy moderno para los que busquen un contraste de épocas. Al entrar te sientes como en una película ya que tan acogedora decoración está en parte inspirada en el cine. Por ejemplo, éste ventanal con palillería de acceso al comedor fue un diseño inspirado en “La casa de los espíritus”, película de la que Fernando, el director del hotel quedó prendado. En este video, en el minuto 5:28 podéis ver la exactitud de ambos ventanales.
(Está feo que yo lo diga, pero ya de paso ¡podéis ver la peli!)
Otra curiosidad de esas que se pueden contar es que la mesa que preside el hall, es una mesa que pertenecía a los Emiratos Árabes. En ella se han sentado dirigentes políticos que ni podríamos imaginar… (yo no podía quitarme de la cabeza a Gadafi, os lo juro).
Para más inri, este hotel se comunica directamente con el balneario mediante pasillos interiores, lo que facilita tremendamente las cosas en caso de lluvia o temperaturas bajas y además tiene todas las facilidades: parking, salón de juegos, cafetería, biblioteca y Wi-Fi, aunque he de confesar que solamente funciona en ciertos lugares… mi habitación no era uno de ellos. Pasar una noche aquí con desayuno incluido son 72€ la individual y 90€ la doble.
Hotel Varinia Serena: Lo que destaca al entrar al Varinia Serena es que te sientes como en casa al tener una decoración muy hogareña y típica de Extremadura. Además de cubrir todas las necesidades del huésped, con Wi-Fi, sala de juegos, cafetería o sala de reuniones, el hotel consta de un patio ajardinado con todo tipo de plantas y una terraza desde la que se pueden disfrutar unas increíbles vistas del embalse, la sierra y el pueblo. El hotel debe su nombre a la hija del patricio romano Licinio Sereniano que curó su infertilidad gracias a las aguas del balneario. Por ello, el balneario se construyó en agradecimiento a la diosa Juno (diosa de la fertilidad).
La temporada para visitar estos hoteles es del 15 de Marzo al 12 de Diciembre aproximadamente.
Dando un paseo por el balneario de Alange
Una vez llegados a Alange y alojados, estamos listos para pasar a la acción, o más que a la acción al más puro relax…
Hidromasajes, piscinas frías y calientes, duchas escocesas, todo tipo de tratamientos faciales, masajes, inhalaciones y oxigenaciones os están esperando pero… como lo normal es que no tengamos ni idea de lo que nos están hablando, os lo ilustro que siempre es de agradecer… (He de decir que lugares transitados como la piscina de hidromasajes o el baño turco no os lo he podido fotografiar, ya que al haber mucha gente usándolos no se permitía hacer fotos… cosa lógica)
Pude disfrutar de algunas cosas más, como un buen masaje de 35′ que me dejó relajadísima o una aplicación de parafangos en las cervicales… ¿Que en que idioma estoy hablando? Pues sencillo, esta cosa del parafango se trata de aplicar una mezcla de arcilla, parafina, óxido de magneso y agua mineral a unos 45º aproximadamente (los mismos que hace en Córdoba en agosto) para el alivio de dolores musculares, reumatismo, artritis… ¡Vamos, que me quedé como nueva…! Así que solo os digo:
Visitad el Balneario de Alange, ¡Trajano y Adriano lo hubiesen querido así!