
Isla principe: vegetación aislamiento… y exorcismos. Viaje por la Isla de Príncipe, una isla de Santo Tomé y Príncipe en la que visitamos la Roça Sundy, Praia Banana, su capital Santo Antonio y mucho más
10 razones para visitar Santo Tomé y Príncipe, una excolonia portuguesa en el Golfo de Guinea en África: Visitar las roças o antiguas plantaciones de cacao, Comer enormes centollos y otros mariscos, Relajarte en una playa perfecta, Ir a misa, Estar en el centro del mundo en la Isla de Rolas, Conocer a los santotomenses, Admirar el arte africano contemporáneo, Maravillarse con la vegetacióny Aislarse de todo
Después de la visita al terreno deforestado para el cultivo de aceite de palma nos volvimos a tiempo a Porto Alegre para asistir a una misa. Dicho así, y viniendo de mí, suena bastante raro. Lo que ocurre es que la gente del pueblo quería que acudiéramos justo ese día porque la celebración en la iglesia trataba sobre “manifestaciones”, es decir, provocar que el diablo se manifieste en una persona y su consiguiente exorcismo. Y algunos tenían fe en que si veíamos estas cosas comenzaríamos incluso a creer en Dios, en el diablo o en el más allá. Si bien es cierto que la gente se lamentaba porque el cura angoleño que había antes –y al cual conoceríamos en la isla de Príncipe- era capaz de hacer que treinta personas se “manifestaran” al mismo tiempo y el novato que había ahora, a duras penas conseguía un solo caso.
En una de esas fiestas en las que se reúnen los expatriados de la isla me comentaron que en el sur de Santo Tomé y Príncipe estaba viviendo un español que no salió en “Españoles por el Mundo”. No sé si fue decisión del programa o si alguien con poder en el país africano pensó que dañaba la imagen exterior pero el hecho de que no contaran con él no fue algo casual. Sea como sea nosotras teníamos pensado viajar al sur y de pronto se nos ocurrió visitar a este personaje, ¿por qué no?
Lo que no sabíamos es que P. nos mostraría aquello que no debíamos ver, la deforestación de Santo Tomé y Príncipe para la producción e aceite de Palma.
Era el segundo día de nuestro viaje por Santo Tomé y Príncipe, no teníamos Jet-lag –sólo hay dos horas de diferencia con España- y teníamos todas las energías del mundo y las ganas de conocer este pequeño país africano. Decidimos comenzar por el norte, que prácticamente se puede visitar en una jornada. Para ello pactamos con dos motoristas un recorrido que duraría hasta el anochecer y comenzaría desde primera hora de la mañana… claro que aquí la gente se excusa bajo el ritmo leve-leve que llevan en la sangre para ser impuntuales, y el sol se pone a las seis de la tarde, lo que hace que los días sean algo más cortos de lo que estamos acostumbrados. Sea como sea aprovechamos la jornada en un recorrido que incluiría ruinas de plantaciones de cacao, playas paradisíacas, snorkel, tortugas, pueblecillos… y centollos.
Santo Tomé y Príncipe I: Toma de contacto. Hace unos meses os anuncié que había ganado en un concurso gracias a vosotros dos tickets de avión a Santo Tomé y Príncipe, el segundo país más pequeño de África tras las Islas Seychelles. Anita y yo decidimos lanzarnos en septiembre a la aventura al país más remoto y desconocido en el que he estado nunca.