Qué comer en Marruecos
¿Qué comer en Marruecos?
Una de las excusas más interesantes para viajar es la gastronomía. Descubrir universos gustativos llenos de colores y texturas nuevas que nos mimetizan con el lugar que estamos visitando. Nuestro paso por el norte de Marruecos (Fez, Chefchaouen, Tetuán, Meknes y Asilah) fue también una gastro- aventura muy placentera, totalmente cubierta con un presupuesto diario de menos de veinte euros (aun siendo exquisitos es raro superar los 30€/día). Accesible para todos los bolsillos y casi todos los paladares.
Puedes leer nuestro viaje por el norte de Marruecos en transporte público en 10-12 días.
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Primera parada, el desayuno
Lejos de lo que pueda parecer, el desayuno marroquí contempla ingredientes que nos son bastante familiares como el queso, la mantequilla, la mermelada, la miel o el aceite de oliva, al fin y al cabo somos vecinos y nuestra cultura es un mestizaje de pueblos aledaños.
Pero como no todo iba a ser igual, aquí os detallo varios ”imprescindibles” marroquíes que podéis añadir a vuestra dieta matutina.
“Harcha”: Un panecillo hecho de sémola de trigo muy característico de la época del Ramadán y también un elemento fundamental en desayunos y meriendas. “Como quien come tostadas”, siéntete libre de acompañarlo con lo que quieras, lo más característico es el queso fresco de cabra, la miel y la mermelada.
Una variante muy cercana son las Rghaifs o tortas marroquíes, también conocidas con el nombre de Msemen (si, todo muy sencillo de pronunciar). Estas tortas vienen a ser una adaptación de nuestras tortitas pero con forma rectangular y al igual que las anteriores pueden acompañarse con lo que más te apetezca.
Las aceitunas y encurtidos varios son un elemento básico en su alimentación moruna por lo que no es de extrañar que a la hora de desayunar te los encuentres como parte de su oferta gastronómica.
Los dulces
Los más golosos están de suerte, los marroquíes tienen un elenco de pastelitos muy variado que suelen acompañar con el té tras las comidas o bien en el desayuno, todos ellos adictivos y con un alto contenido calórico. Algunos de los más típicos son “Krichlat”, “Faqqas”, “Malawi” y “Kaab Ghzal”, con una base de harina de trigo, azúcar o miel y frutos secos.
Para los clásicos existe la opción de tostadas con aceite de oliva virgen, mantequilla, mermelada, queso o miel. El café, solo o con leche, puede terminar de dar un toque clásico al desayuno, aunque yo te recomiendo que aproveches la visita y pruebes alguno de sus maravillosos tés.
Qué comer en Marruecos
Aquí la oferta parece muy variada pero en una semana puedes probar casi todo, o al menos lo más importante.
Cuscús
“Cous-cous”: Del bereber “seksū o kseksū”, que significa “redondito”, un alimento fundamental de la cocina árabe, hecho de sémola de trigo. Acompañado de verduras y/o carne, se sirve en un recipiente de barro que recibe el nombre de “Tajine”. Un plato muy sabroso que ha de comerse siempre caliente. Su variante fría se llama “Tabulé” (del arabe abboulah) y es típica del Líbano, aunque también puede encontrarse fácilmente en Marruecos no es característico de la zona.
Tajine
“Tajine”: No es que me haya confundido, es que el contenido recibe el mismo nombre que el continente. Se puede hacer casi de cualquier cosa aunque los más típicos sean de pollo, ternera, cordero, “Kefta” (carne picada) e incluso pescado, aunque este último es más recomendable en las zonas costeras como Asilah.
Se trata de un estofado cocinado a fuego muy lento dentro de este plato de barro de gran diámetro y poco fondo que se caracteriza por tener una tapa cónica. Esta tapa mantiene el calor antes y después de la cocción, el vapor se condensa en la parte superior y vuelve a caer sobre los alimentos evitando que se resequen mientras se cocinan.
Harira
“Harira”: Es una sopa tradicional de Argelia y Marruecos que aunque consumida durante todo el año, su alto poder nutritivo la hace fundamental en la rotura del ayuno del Ramadán.
Un plato que contempla una gran lista de ingredientes como carne (así se le llama genéricamente a la ternera), hortalizas, legumbres (garbanzos y lentejas), harina, fideos, jengibre, cilantro y perejil. Muy sabrosa y apetecible casi a cualquier hora, eso si, no apta para dietas bajas en calorías ni para paladares suaves.
Bisara
“Bisara”: Sopa tradicional del norte de Marruecos, especialmente de la zona del Rif, cuya base fundamental es la harina de habas, aunque también puede hacerse con harina de guisantes.
Es muy sencilla de elaborar y muy rica, se sirve acompañada de un buen chorro de aceite de oliva y comino en polvo. Además es un alimento excepcional para combatir el frío.
Kebap
“Kebab” o en su variante turca “Sis Kebap”: Fácil caer en el error de imaginar un “Döner”, “Shawarma” o “Durum”, ya que aunque el termino solo se refiere a la carne cocinada a la brasa y servida habitualmente en palitos de madera o metal, (lo que vendría siendo un “pinchito moruno”), la cultura occidental ha ido degenerando el termino.
La carne tradicional del Kebab es el cordero pero dependiendo de los gustos locales y las prohibiciones religiosas pueden encontrarse multitud de variantes como el pollo, la ternera, el pescado e incluso el cerdo. En Marruecos, como era de esperar, este último ni se tendría en cuenta. El adobo es el secreto de estos sabrosos pinchitos y por lo general está hecho a base de comino, pimienta negra molida, jengibre, pimentón dulce, cúrcuma y azafrán.
Posteriormente se la añade ajo, cilantro picado, cebolla, perejil, zumo de limón, sal y aceite. Lo ideal sería dejar la carne (o pescado) macerando durante 24 horas pero si esto no fuera posible con dos o tres sería suficiente. Pueden acompañarse de arroz, ensalada o bien un cous-cous sencillo e incluso verduras a la brasa.
Pastela Marroquí
“Pastela Marroquí”: La pastela, pastilla o bastilla (del árabe bastil·la بسطيلة) es un delicioso entrante de hojaldre hecho a base de pasta filo y relleno de cebolla caramelizada, carne de paloma o pollo (aunque en las zonas de costa también se hace de pescado), perejil y almendras, espolvoreado con azúcar glas y canela.
Un curioso y delicioso plato con aromas dulces, salados y especiales que se toma fundamentalmente en época de fiestas y que además de en Marruecos puede degustarse en zonas como Túnez o Argelia. Mi plato favorito, junto con el Tajine de cordero, por lo que podría decir que ambos son casi de “cata obligatoria”.
Qué beber en Marruecos
Para acompañar estos suculentos platos y sentirse un auténtico marroquí “lo suyo” es tomarse un té: el más común el “verde con menta” y el más gourmet “la mezcla Real”, una combinación de hierbas, tés y especias que dan como resultado una aromática e intensa infusión.
Para aquellos que no toleren la cafeína pueden optar por beber una infusión de “Hierba María Luisa”, relajante y muy fresquita. también sorprende la variedad de zumos de frutas y batidos artesanales, especialmente el zumo de naranja que puede encontrarse casi en cualquier parte (incluida la calle) a un precio irrisorio si lo comparamos con España, ya que por 15Dh (1,5€) puedes disfrutar de un vaso fresquito y recién exprimido, apetecible a cualquier hora.
El alcohol es complicado de encontrar, sobre todo en la parte de la Medina, y bastante más caro. Aunque si “te entrase el apretón cervecero” no es imposible hacerte con una en la zona nueva de la ciudad donde te encuentres. Te recomiendo que optes por cualquiera de las otras opciones si quieres disfrutar de una buena comida y no marearte dando vueltas. Si por el contrario eres de los que beben agua, siempre mineral, por favor.
Un artículo de Marla:
Nacida en Zaragoza, Marla es una apasionada de la música y la gastronomía. Tras cinco años en la industria discográfica se embarca en un proyecto personal muy interesante denominado Music Is For Foodies. En él, músicos de renombre muestran sus habilidades culinarias a un grupo reducido de fans de la mano de un reconocido chef.
Excursiones por Marruecos
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A mi el tipo de comida de Marruecos como que no. Supongo que habra más cosas de comer, o todo es cuscus, kebabs y esas cosas. Yo el cuscus lo comí en casa hecho por una argelina y en Egipto y la verdad, me dió un poco de asco, todo mezclado, carne de cordero guisada, bluuu, no soporto el cordero guisaso. En fín que para pasarlo mal, mejor cambiar de destino. De todos modos tampoco es la ilusión de mi vida.
Cuanta amargura en tu comentario.
Siempre puedes pedirte algo más occidental, pero con esa actitudy prejuicios, mejor ir a otro destino.
Que el cuscús te de asco es un poco raro. Si me dijeras que te da la asco la carne del mercado llena de moscas lo entendenría, ¿pero el cuscús? Es como si me diera asco la pasta o el arroz.
Saludos y que aproveche,
Inés
Buenas tardes:
Quería saber si en Marruecos es posible comer comida que no esté muy especiada o todo lo cocinan igual. Por desgracia tengo ERGE y no puedo comer comida muy intensa pero me muero de ganas de visitar Marruecos.
Un saludo y gracias por compartir tanta información.
El cous-cous o cuscús es, sin duda, el plato más conocido de la cocina marroquí.lo más famoso es el cuscús de las siete verduras, un plato laborioso pero que merece la pena.
Normalmente se hace con carne de cordero, aunque también admite carne de ternera o pollo, según tus preferencias.
Para preparar el cuscus se utiliza una “cuscusera”. Este recipiente se compone de tres partes, la de abajo es una olla estrecha y alta (donde se cocina el guiso), la intermedia es más baja y ancha que la anterior con perforaciones en el fondo (donde se cuece al vapor el cuscus), la superior es la tapa que también tiene algunas pequeñas perforaciones.
La gastronomía de Marruecos es, sin el menor género de dudas, uno de los aspectos del país que mejor le representa ya que, como éste, posee una enorme riqueza y diversidad, debido a la multitud de intercambios culturales producidos a lo largo de su historia.
Sazonada con ingredientes procedentes de la cultura bereber, árabe y mediterránea, se trata de una cocina única en la que a la sencillez y el refinamiento en su elaboración se le une la combinación de los sabores salados y dulces y un uso intensivo de las especias y condimentos.
Marruecos cuenta con gran diversidad de platos e ingredientes, me encanta la combinación del sabor dulce con el salado en un mismo plato. También le ponen habitual a los platos dátiles, uvas pasas, pistachos, almendras… precioso articulo Ines
Exacto, los marroquíes son unos maestros de combinar sabores.
Gracias por pasarte por aquí 🙂
Sin duda el mejor tajine que probé en Marruecos fue en el desierto de M’hamid, de cordero y verduras, con textura de mouse, sublime. Qué pena no haber probado la Pastela Marroquí, tiene una pinta espectacular!
Vas a tener que volver a Marruecos para probar la Pastela. Qué cosa más rica!!! Si tengo que escoger un plato, me quedo con ese 😉
Quisiera saber si en Marruecos la comida es picante en general.
Muchas gracias de antemano.
Hola María Adela. Al contrario de lo que muchos piensan, la comida en Marruecos NO es picante. Existen salsas picantes pero las suelen servir separadas.
Que aproveche!